lunes, 29 de diciembre de 2008

Historias de Año Nuevo

Los personajes y la trama de esta historia son
imaginarios. Cualquier semejanza con personas vivas
o muertas es puramente casual.
Alejandro Jodorowsky
La mujer se encontraba escribiendo en su escritorio, en aquella casa que la había visto crecer desde los 10 años. Con la tele prendida en un programa de la televisión abierta más malo que la crema de habas al que no le ponía atención, y junto a su perro de la edad de esa casa que la miraba de reojo esperando algúna expresión de cariño.
Era la víspera de año nuevo del 2009. La mujer, quien estaba de vacaciones, recordaba los sucesos de ese año que llegaba a su fin. Había sido un buen año, medida que sólo se logra al comparar con años anteriores de los que se tiene conciencia de los cambios y sucesos. Definitivamente uno de los mejores años junto a aquel en el que había tomado un avión para irse a vivir a España. Pero tan diferente a aquel, pues en éste no había podido tomar ningún avión (que no fuera de trabajo), cosa que le apasionaba como pocas cosas. No había conocido ningún nuevo país a pesar de haber tenido varios en su mente: Cuba, Colombia, Canadá, pues sólo había conseguido tener dos semanas de vacaciones, las de fin de año, que por una y otra cosa, decidió pasarlas en casa.
Distraída por el ruido de una pésima "actriz", cuyo único recurso dramático para exaltar sus emociones eran los gritos, apagó la tele activando el iTunes. Alanis Morissette, por qué no? (Ya viene a México!!!)
Recordaba el inicio del año, después de un viaje huída a San Luis Potosí en el que había decidido enterrar algunos sentimientos y emociones en el panteón de Real de 14. Gracias a ese viaje, el año había podido comenzar muy bien, a pesar de los desbarajustes del año 2007 provocados por una inmovilidad física y mental que le provocó ciertos retrocesos en sus relaciones. Así comenzó el año con mucha actitud de sacudirse el polvo, de experimentar múltiples relaciones sin vínculos sentimentales que le permitieran satisfacer lo que en el momento necesitara. Y así transcurrieron los primeros meses, logrando bastantes avances en lo que a free will se refiere, con algún pequeño bache de esos que pululan en la ciudad y que sólo te provocan un #&@#&. Fue en el tercer mes cuando el destino y los recuerdos la llevaron a un lugar extraño pero muy familiar del que no se ha despegado y del que nunca ha querido ni ha podido despegarse: tus brazos...
Tuvo que hacer una pausa para recibir el correo. Aprovechando la pausa se preparó un té verde con una pastilla de chocolate relleno de menta, costumbre recién adoptada que se había convertido en una especie de ritual en su vida.
Recordaba también que el año había comenzado en una escuelita privada de iztapalapa que le había dado grandes aprendizajes pero que sobretodo, había sido una llave para las puertas que se abrirían después. Primero una jefatura de formación de maestros en una oficina de la SEP, puerta que tuvo que cerrar en menos de dos meses al abrírsele otra más grande, una subdirección. Wow, un paso que había tenido que dar en menos de un día con toda la carga y la responsabilidad que aquello implicaba. Y así fue, en abril se mudaba a sólo 10 minutos de su casa para ocupar un puesto lleno de espinas que había que limar. Y así fue, las espinas la lastimaron en los primeros 4 meses, después aquello iba agarrando forma poco a poco y cada vez se ponía más interesante, incluyendo la grilla que había aprendido a hacerla parte de su vida laboral. Y ahora era una borócrata, funcionaria pública e idealista realizando sueños para una de las poblaciones más jodidas de su país: los indígenas. La espera había valido mucho la pena y de la crisis ni sus luces, uff.
Recordaba también cómo el año había comenzado con un anillo de compromiso para su mejor amiga, y cómo esta ocurrencia le provocó varios disgustos y muchas alegrías al tener que estar al lado de una mujer que adora, aguantando sus últimos meses de soltería. Y la esperada boda fue en octubre, con un vestido de dama para amadrinar a la novia más bonita que haya habido. Y de las tres quedaban dos, y me estoy adelantando pero tal vez pronto quede sólo una.... (cruz, cruz).
Por último recordaba que el año había iniciado con su padre en el hospital por una úlcera que les había dando un gran susto pero que no pasó de ahí, uff. Y con una recuperación de su hermano después de años de negaciones y evasivas, ahora el comenzaba a ser El y nadie más.
Seguramente hubo episodios tristes, amargos y difíciles, se acordaba de algunas lágrimas y malos ratos, pero sin importancia porque para que esos sucesos tomen importancia tienen que ser casos no superados, cosa que en este año no había sido así para ella.
Y sus maestros de kick boxing le siguen enseñando defensa personal y desahogo de ira, y los de yoga, meditación y mucha paz. Y en la aventura la habían acompañado Jodorowsky, Günter Grass, Saramago y el marqués de Sade.
¡¡¡Feliz 2008 y un mejor 2009!!!!
P.D. Ya cumplió un año este espacio virtual y debo reconocer que es una buena herencia del destino.

viernes, 12 de diciembre de 2008

Cuenta progresiva

Hoy son 2 años de aquella fractura.

Un año más ya sin ninguna terapia física.

Con toda movilidad del pie y de mi vida.

Un año de muchos giros, todos a favor.

Bendita lupita... y no soy guadalupana pero... el 12 de diciembre es un día que celebro.