viernes, 8 de agosto de 2008

A mi primera ilusión

Mientras el mundo celebra el gran show business "Las Olimpiadas", tu lloras en una tumba la injusta muerte de tu padre, un hombre ejemplar dedicado a su carrera y a su familia.

¿Cuántos años tardó ese numeroso país organizar este magno evento lleno de luz y color, de magia y fantasía? Y ¿cuánto tiempo le llevó a ese par de desgraciados quitarle la vida? ¿Cuánto? Unos minutos.....

¿Cómo puede el mundo celebrar cuando estamos llenos de injusticia, delincuencia, hambre, enfermedad, muerte? ¿Cómo puede el mundo gastar tanto dinero en un evento cuando hay personas que matan por míseras cantidades?

Estoy de luto, y el luto no es vestirse de negro, el luto es un estado de ánimo lleno de pena, de dolor, de indignación, de rabia, de tristeza. Y me duele por tí, por tu dolor, por tu hermano, porque sé que debes estar pasando por un momento que nunca esperaste pasar.

En algún tiempo fuimos tu y yo tan cercanos, y ahora no me atrevo a llamarte para ofrecerte mi apoyo. Lo hice con mucho temor, en estos casos no se sabe qué decir. Te noté sereno, fuerte como siempre.

Recuerdo que nos alejamos por tus dudas, porque decidiste dejar la administración apenas empezada la universidad para seguir los pasos de tu padre, pasos que te negabas a pisar, querías ser tú mismo pero no pudiste negar su legado. Y gracias a ese cambio que tanta angustia te causó él estaba muy orgulloso de tí y eso nadie te lo va a quitar nunca. Quédate con eso y trata de olvidar el dolor, eres muy fuerte.

Y pensar que todas estas palabras sólo las puedo dejar aquí en este espacio virtual, sin lector alguno, o para un par de ellos.
Así es mejor, sé que estás bien acompañado y que yo ya no soy parte de tu vida, ni tu de la mía.

Que la vida te enseñe el camino para seguir adelante.... D

No hay comentarios: