Escarbando en mis recuerdos

¿Qué estoy haciendo aquí y allá? La vida te pone enfrente situaciones que te llevan a lugares incalculados. Mi memoria esta vez. Encuentro bastantes telarañas que no me dejan ver del todo, mismas que propiamente yo tejí con cuidado. Y este blog que fue testigo de algunas emociones pasajeras, pasadas y ajenas a mi presente. Otras más bien consolidadas. Otras que no me reflejan más. Otras que fueron como un escudo protector de otros tiempos. Pff qué tiempos.

Heme aquí, escarbando ese pozo.

Ya no soy más esa, y sí. Ya no miro con esos lentes, y sí. Ya no finjo más ni tengo necesidad, y sí. Pero en definitiva no podría volver a sentir aquello, ni a escribir de ese modo, ni a quejarme de ello. Soy, pero ya no. Conservo tesoros preciados, deseché algunos diamantes bien brutos, olvidé bastantes nombres, superé tropiezos y rencores -no todos-.

Escarbando me encuentro también unos lentes ajenos, lejanos. Una mirada paralela de ese pasado, que caminó por el mismo rumbo sin ser el mismo camino. Y atiendo con humor las opiniones adversas y desafortunadas. Invaluable el que no hubiera un cruce que juntara los pasajes (¿A quién se le agradece?)

Hasta ayer, ¿o antier? ¿Quién osa atravesar esas dos extrañas miradas tan lejanas entre sí? Debe ser algún ente de la villa del señor, ese que llaman dios y en el que no creo (un absurdo del cerebro humano, esa máquina cuasi-perfecta). Solamente alguien de ese cielo inventado tan fabricadamente puede haber unido las piezas ¿O cómo explicar el cruce? Intento no caer en el arado, nuevamente, de unas tierras añejas donde no hay nada más que sembrar.

Y heme aquí. ¡Sí! ¡Se nota el tiempo mental libre del que dispongo! Ahora, en tiempos de transición, y de cambios en mis días ordinarios. Y esto apenas empieza.

Comienzo a despedirme de los conflictos cognitivos sobre lenguaje, matemáticas, ciencias sociales y naturales. ¡Bienvenidos MIS conflictos existenciales!