A casi cinco años de un periodo único.
Si la medida de las cosas es lo que llevo haciendo durante este tiempo día a día,
sin detener mi actuar, proyectando, soñando y realizando,
escribiendo, diseñando,
concretando 4 libros,
educando...
Si tomo eso como punto de partida de este post,
el periodo ha sido único.
Lleno de retos, de ilusión, de determinación, de logros.
Lleno también de cansancio, de desazón, de entripados, de indignación.
Casi cinco años... ni un solo día me aburrí, ¿en qué trabajo logra uno eso?
Qué dejo: lo que sé, todo en lo que creo, lo que aprendí, resultados, lealtades, envidias..., mi corazón.
Qué me llevo: conocimientos, sabiduría, muchos viajes, amistades, confianza, algunos achaques, satisfacción, forma y ganas de seguir...
Qué sigue: estudio, descanso, un nuevo proyecto, más retos, otro país, otro hemisferio, nuevos amigos y a saber...
Será difícil recoger mis pertenencias de mi oficina. Pero es una decisión tomada no por nadie más.
¿Cuándo? No lo sé... pronto
Voy a extrañar lo que hago.
domingo, 4 de noviembre de 2012
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