domingo, 10 de febrero de 2008

Trátame suavemente

Para tí, para mí.

(Me gusta que me la cantes al oído).

(Ya) no quiero (no voy a) soñar mil veces las mismas cosas, ni contemplarlas sabiamente, quiero que me trates (y tratarte) suavemente.

¿Y si juntamos nuestros miedos? ¿ Si los guardamos en un lugar que ambos conozcamos?

Sin sorpresas, así es, me da miedo, mucho, ¿me lo quitas? ¿te lo quito? ¿Cómo se hace eso?

Tenés (y tengo) que comprender que no puse tus miedos (ni tu los míos), donde están guardados. Y que no podré (ni podrás) quitártelos, si al hacerlo me desgarras (y te desgarro). Y que la inconstancia no es algo heroico, sino más bien algo enfermo.

Sólo Trátame Suavemente.

No hay comentarios: