No se si se deba a la luna, la cosa es que aquí estoy, 7:30 pm en casa, cosa de verdad muy extraña desde mi entrada a este trabajito que qué bárbaro, qué bruto, ah qué chinga me estoy metiendo. Dicen por ahí que cuando el gato no está, los ratones bailan, y pues sí pero en este caso no es esa la razón de poderme salir temprano, a una hora decente como para ver todavía la luz del día al llegar a casa. La razón es que.... bueno sí, me salí porque mi jefa está de viaje.
Y por ahí me preguntaron: ¿por qué ya no has escrito en tu blog? Y pus obvio, ni tiempo para el ocio, y además como que no tengo de qué quejarme o de quien quejarme (porque si te conocí, ni me acuerdo y si me acuerdo, borrón y páseme la cuenta). Y como que eso de escribir lo bien que me va, o quejarme del trabajo, como que qué hueva y asco, así que... mejor hasta ahí la dejamos.
Pero para no perder la costumbre, aunque sea posteo esto que me recomendaron hace tiempo y que la verdad es un buen hallazgo. Y como no, si me lo recomendó ese que me arranca los suspiros. Pa' ti.
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